Siempre que salimos de casa, sobre todo si vamos a estar fuera durante varios días o semanas, a todos nos asalta una preocupación: ¿me estarán vigilando ahora para entrar a robar mientras no estoy? Es normal. Basta ver cualquier programa informativo para saber que este tipo de delitos están a la orden del día. Sin embargo, hay formas muy sencillas y efectivas de proteger nuestra vivienda sin necesidad de contratar un servicio de alarma.

Nos referimos, cómo no, a las cámaras de videovigilancia. Un buen ejemplo nos lo ofrece esta TP-Link TAPO C310. Es válida tanto para interiores como para exteriores y puede conectarse a la red WiFi de tu hogar. De este modo, si sus sensores de voz o movimiento se activan al detectar la presencia de un intruso, recibirás automáticamente una notificación en tu móvil. Si ves que sucede algo extraño, podrás llamar a la policía aunque te encuentres a cientos de kilómetros de distancia.

Sin embargo, las cámaras de vigilancia pueden tener otros muchos propósitos. Sería el caso, por ejemplo, de espiar lo que sucede en el interior de la vivienda sin que nadie se dé cuenta. Una posibilidad que brinda esta mini cámara espía inalámbrica Aobocam. O, como esta cámara con monitor Boifun, saber cómo se encuentran nuestros hijos durante la noche cuando duermen en su propio cuarto. Como ves, hay muchas alternativas. Aquí queremos analizarlas todas.

No todas las cámaras de vigilancia que podemos encontrar en el mercado son iguales. Generalmente, sus características varían en función del objetivo para el que han sido diseñadas. Por este motivo, aquí queremos hablarte de los cuatro tipos más importantes. Una información que te servirá para descubrir qué es exactamente lo que estás buscando:

Ya conoces todos los tipos de cámaras de vigilancia que hay disponibles en el mercado. Sin embargo, aún no te hemos dicho nada acerca de los factores a tener en cuenta a la hora de elegir entre un modelo y otro. El primero es la resolución de la cámara. Como mínimo, ha de ofrecer imágenes en FullHD 1080p, si bien es cierto que cada vez hay más que alcanzan el 2K y que mantienen una relación calidad-precio excelente.

Contar con sensor de movimiento y buena resolución, claves a la hora de elegir cámara

Por su parte, la videocámara de vigilancia ha de contar con sensores de movimiento y de voz con el propósito de detectar cualquier situación no deseada como, por ejemplo, la presencia de intrusos. También ha de permitir el movimiento en horizontal y vertical. Y, si puede conectarse a la red WiFi y emitir imágenes y notificaciones en tiempo real, mejor. Dicho esto, ya podemos entrar de lleno en esta comparativa.

Empezamos hablando de una cámara de vigilancia WiFi válida tanto para interiores como para exteriores. Esto se debe, principalmente, a que cuenta con un certificado de resistencia al agua de tipo IP66. Ofrece una resolución de imagen de 3 megapíxeles y visión nocturna, por lo que no conlleva ningún problema a la hora de grabar vídeo durante la noche. Por si fuera poco, incluye un sensor de movimiento y un sistema de alarma de luz y sonido. Hasta se puede controlar a través de una app móvil compatible con Android e iOS y con el asistente de voz Alexa.

Otra alternativa válida para interiores y exteriores. Destaca, en primer lugar, por ofrecer imágenes de alta resolución gracias al estándar 2K. También cuenta con visión nocturna, audio bidireccional y sensor de movimiento. Es impermeable y puede rotar en ángulos de 360º para grabar la totalidad del espacio. Por su parte, brinda la posibilidad de almacenar las grabaciones en una tarjeta SD o en un servicio en la nube. Basta con conectarla a la red WiFi doméstica.

Esta cámara no solo cuenta con un sensor de movimiento que le permite detectar presencia humana indeseada en el interior o exterior del domicilio. Además, una vez captada, sigue al individuo de manera automática. También envía una notificación a través del teléfono móvil que permite al usuario monitorizar la grabación en tiempo real. Admite tarjetas SD de hasta 128 GB, si bien es cierto que también puede guardar las grabaciones en la nube.

Aquí hablamos de una cámara que no solo es capaz de detectar movimiento, sino también sonido gracias a su micrófono integrado. Es más, cuenta con altavoces que permiten al usuario hablar de forma remota utilizando su teléfono móvil. El tiempo de configuración es de entre 2 y 4 minutos y captura imágenes en formato FullHD (1920 x 1080 píxeles). Especial mención merecen sus 18 luces infrarrojas para ofrecer visión nocturna clara y nítida.

No hace falta conectar esta cámara de vigilancia a la red eléctrica gracias a su batería integrada de 10.400 mAh. Este elemento es capaz de proporcionar hasta 120 días de autonomía suponiendo que se encienda una media de 10 veces diarias durante 30 segundos. Una vez que lo hace al detectar movimiento, envía una notificación al teléfono del usuario en un plazo de entre 0,2 y 2 segundos. Es tan fácil de instalar como colocar tres tornillos en la pared.

¿Buscas una cámara de vigilancia IP que puedas instalar tanto en interiores como en exteriores, que te brinde imágenes panorámicas de gran calidad de día y de noche y que cuente con una alarma sonora integrada? Entonces, este modelo es perfecto para ti. Es más, su foco puede regularse tanto en el plano horizontal como en el vertical (hasta 90º). Así, y gracias a su sensor de movimiento, podrás grabar imágenes con resolución 2K siempre que detecte presencia humana no esperada.

Es posible que no tengas suficientes con una sola cámara de videovigilancia. En ese caso, este kit formado por cuatro dispositivos de 5 MP te vendrá fenomenal. Todas ellas cuentan con detección de movimiento y visión nocturna. Además, la oferta incluye un monitor a través del cual podrás visualizar las imágenes capturadas por todas ellas de manera simultánea y un disco duro de 1 TB en el que guardarlas.

Tampoco podemos descartar la posibilidad de que quieras saber cómo se comporta la niñera que has contratado para cuidar de tu bebé cuando no estás o la persona que se hace cargo de tus padres o abuelos. En este caso, lo que necesitas es una mini cámara espía como esta. Basta con ubicarla en un lugar apartado de la vista y conectarla a la red WiFi para obtener imágenes FullHD 1080p tanto de día como de noche. Su diseño extremadamente pequeño te facilitará hacer que pase desapercibida.

¿Tu bebé ha empezado a dormir en su propio cuarto por la noche y te preocupa que esté bien en todo momento? Entonces, esta oferta te vendrá fenomenal. Está formada por una cámara equipada con sistema de visión nocturna, micrófono y altavoz, monitor de temperatura y despertador. Funciona a batería y, además, se conecta a un monitor inalámbrico con pantalla LCD de 3.2 pulgadas. A través de él podrás controlar también cualquier parámetro de su funcionamiento.

Vamos a terminar con una alternativa muy parecida a la que hemos descrito anteriormente. De hecho, sus características son prácticamente idénticas. Especial mención merece su rango de alcance, que es superior a los 200 metros. Sin duda, una opción ideal para asegurarte de que tu bebé descansa correctamente y saber cuándo llora y debes ir a consolarle.

En definitiva, hay muchos tipos de cámaras de vigilancia. Por ello, esperamos que, a través de esta comparativa, te hayamos ayudado a elegir el adecuado para ti. Tanto si tu objetivo es proteger tu vivienda ante la entrada de ladrones como si quieres cuidar mejor a tu bebé cuando deja de dormir en tu cuarto. O, incluso, si te apetece saber cómo se portan tus mascotas cuando no estás en casa.

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Siempre que salimos de casa, sobre todo si vamos a estar fuera durante varios días o semanas, a todos nos asalta una preocupación: ¿me estarán vigilando ahora para entrar a robar mientras no estoy? Es normal. Basta ver cualquier programa informativo para saber que este tipo de delitos están a la orden del día. Sin embargo, hay formas muy sencillas y efectivas de proteger nuestra vivienda sin necesidad de contratar un servicio de alarma.